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La fotoqueratitis, también conocida como queratitis ultravioleta o queratitis UV, es un síndrome agudo que ocurre después de la irradiación UV de los ojos. La exposición puede no ser aparente inicialmente para el paciente, ya que hay un período de latencia (6 a 12 horas) entre la exposición y el inicio de los síntomas.
Muchas actividades recreativas y ocupacionales están asociadas con la exposición a los rayos ultravioleta (UV) y el potencial de fotoqueratitis en los ojos sin protección.
La fotoqueratitis puede ser causada por el reflejo del sol en la arena, el agua, el hielo y la nieve. También puede sufrirla al mirar directo al sol, como al mirar un eclipse solar sin usar la protección adecuada. Un eclipse solar también puede causar una quemadura a largo plazo en la retina, que es más grave que un daño temporal en la córnea.
Además, también la producen muchas fuentes de luz ultravioleta artificiales, como lámparas y camas solares, o la soldadura por arco.
La fotoqueratitis afecta a la capa superficial delgada de la córnea y a la conjuntiva, produciendo diferentes síntomas, cuya gravedad depende del tiempo de exposición a los rayos UV:
● Dolor ocular intenso
● Sensación de arenilla
● Irritación ocular y ojos rojos
● Visión borrosa momentánea
● Lagrimeo
● Sensibilidad a la luz brillante
● Pupilas pequeñas
● Presencia de aureolas
Para diagnosticar la fotoqueratitis, y la severidad de la afección, es necesario realizar una anamnesis sobre sus síntomas y las actividades realizadas recientemente, conjuntamente con una exploración oftalmológica. Para tal fin, el médico especialista podría instilar gotas con contraste de fluoresceína sobre sus ojos, que le permita determinar con exactitud el daño provocado por los rayos UV.
La fotoqueratitis suele desaparecer por sí sola. El tratamiento apunta a aliviar los síntomas y las molestias mientras desaparece el síndrome:
● Si usa lentes de contacto, evitar su uso.
● Evitar frotar los ojos.
● Aplicar compresas frías (ver procedimiento en el apartado “Golpe muy fuerte o corte en el ojo” de la sección “ACUDIR A GUARDIA” en guías de salud ocular).
● Usar lágrimas artificiales de venta libre.
● Descansar la vista, evitando exponerse a los rayos UV.
● Usar colirios antibióticos o analgésicos, si el oftalmólogo se lo recomienda.
En caso de lesiones graves en la córnea o en la retina, será necesario recurrir a tratamientos más específicos y complejos.
La fotoqueratitis se puede prevenir con medidas de protección ocular y cambios de hábitos aplicados por el paciente:
1 – Utilizar lentes para sol que tengan el sello “UV400” o “100% de protección UV”, y que bloqueen tanto los rayos UV-A como los UV-B.
2 – Utilizar lentes de nieve diseñadas para bloquear los rayos UV, que además, tengan protección lateral.
3 – Proteger los ojos al soldar utilizando casco de soldador.
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